Nada es más importante que la precisión; un escáner intraoral primero debe tener la capacidad de crear una impresión digital precisa. Necesitamos saber que la exactitud es la suma de veracidad y precisión. La veracidad se define como la "cercanía de concordancia entre la expectativa de un resultado de prueba o de una medición y un valor verdadero". La precisión se define como la "cercanía de concordancia entre indicaciones o valores de cantidades medidas obtenidos mediante mediciones repetidas en los mismos objetos en condiciones específicas". En pocas palabras, la veracidad es la capacidad de una medida de igualar el valor real de la cantidad que se mide. La precisión es la capacidad de una medición de repetirse consistentemente.

Un escáner intraoral debe tener una alta veracidad y eso significa que debe poder coincidir lo más posible con la realidad: el modelo virtual 3D capturado por el escáner debe parecerse lo más posible al modelo real, con una desviación mínima de la realidad. Generalmente, el medio para evaluar la veracidad de un IOS es superponer sus escaneos con un escaneo de referencia obtenido con una potente máquina industrial. Después de superponer estos modelos, se puede utilizar un potente software de ingeniería inversa para generar mapas colorimétricos que muestren las diferencias entre las superficies del IOS y el modelo de referencia a nivel de micras. Para calcular la precisión, simplemente superponiendo diferentes modelos tomados con el mismo escáner intraoral en diferentes momentos y evaluando nuevamente las diferencias a nivel de micras.